Sunday, February 17, 2008

Las ilusiones perdidas.

Es triste para mí, ver día tras día como en un país como Colombia, ocurren las más grandes injusticias por culpa de unos cuantos que no merecen vivir y merecen ser tratados como seres humanos.
Lo digo porque el día de ayer, sabado 16 de febrero del año en curso, en la ciudad de Bucaramanga (Santander) se cometió una de las tantas injusticias que se cometen en este país; siendo una joven de tan sólo 21 años de edad, Diana Carolina Ferreira quien fuera mi amiga y yo su consejera, conoció la muerte por culpa de una bala perdida.
Diana soñaba con ser medico, por lo que hablé con ella esta era su vocación desde pequeña, había nacido para ser medico y estaba en la universidad estudiando para serlo. Cuando la conocí, ella me contó su sueño y yo le dije que si uno se proponía a lograr algo lo conseguía con la ayuda de Dios, le dí mi ejemplo y también le conté mis sueños, le dí ánimo para seguir adelante, le dije que no debía descansar hasta hacer su sueño realidad. Al tiempo ella se lo propuso y entró a estudiar medicina en una universidad en Bucaramanga, siguió mi consejo y tiempo después me agradeció por haberla motivado a seguir sus sueños y convertirlos en realidades. Entonces hablabámos por messenger de vez en cuando y me contaba como iban las cosas.
Hoy estando en mi apartamento aqui en la fría Bogotá conocí la noticia, al principio no lo pude creer, alguien tan joven y sin vicio alguno no podía morir porque si, después mi mamá me contó que había sido una bala perdida. Recibí la noticia por telefono, mi madre esta desconsolada y yo también.
Ahora siento rabia y dolor. ¿Por que a las personas buenas le pasan cosas malas? ¿Por que tiene que ser así? ¿Por que le quitaron todo? ¿Por que tuvo que estar en el lugar equivocado, en el momento equivocado? ¿Por que ella?
Lo más triste de toda la historia es que el crimen de Diana Carolina pasará a engrosar la lista de impunidad que existe en el país, todos aquellos que matan sin ser juzgados y andan por ahí como si nada.