Saturday, November 23, 2013

Quiero televisión y cine más real.

A veces me pongo a pensar en todas esas historias fantasiosas que he visto desde pequeña tanto en televisión como en el cine y todas tienen un ingrediente común: quienes las protagonizan son hombres atractivos y esto trajo un gran perjuicio en mí: durante mucho tiempo observé lo diferentes que eran los hombres que veía a diario, está bien, lo que quiero decir realmente es que los hombres que uno ve a diario son mucho más feos que los hombres que salen en las películas y series de televisión (excepto Danny Trejo que protagoniza Machete).
 Nunca me ha parecido justo que a las mujeres no hagan una falsa idea del mundo, sobre todo porque el cine y la televisión crean ideas en las personas (como que todos los orientales saben artes marciales) y a las mujeres nos siguen creando falsas expectativas (más contando que vivo en un país latinoamericano y  aquí le dan a uno ganas de llorar).
Recuerdo que hace poco un amigo dijo: "Basado en hechos reales significa que ocurrió en la vida real pero con personas feas" y esa frase me pareció muy acertada.
Ojo, no me vayan a malinterpretar porque no soy superficial, solo que me gustaría ver personajes más reales, más cercanos a nosotros, los mortales de a pie. Un ejemplo de eso fue la serie que hicieron basada en la vida de Joe Arroyo, si buscan en Google encontrarán que el protagonista de la serie es un churro y que el verdadero Joe (Q.E.P.D) en realidad era bien feo.
En la vida real, si me tropiezo en un andén y caigo el hombre que me ayuda es el señor barrigón con ese extraño color cobrizo (cortesía de la genética indígena), a mi no me va a tender la mano Johnny Depp. En la vida real, si me subo a un bus, el que busca hacerme charla porque soy joven y  le parecí bonita (cortesía de mis genes europeos) no es Vin Diesel, le encuentro más parecido con Edgardo Roman o con Tego Calderón.
Así que señores, para las mujeres reales y que vivimos el día a día entre Transmilenio para la oficina y almuerzo tipo corrientazo, las comedias y dramas románticos de Hollywood no nos representan. Mucho menos me representa la televisión colombiana porque no tengo silicona en las tetas ni en las nalgas, no ando en carro, ni uso tacones de diez centímetros, no hago Yoga ni voy al gimnasio dos horas diarias.
Puede ser que a otras personas les guste ese mundo de fantasía que nos han vendido por tantos años pero a mi me tiene aburrida y decepcionada, prefiero la gente y el mundo real así sea más feo y cruel.